Con ingresos de 3,484 millones de euros, un 22.6% más que en 2011, e ingresos por explotación que alcanzaron la cifra de 1,119 millones de euros nos dieron cuenta de la fuerza que ha tomado Hermès en todo el mundo. En total, el crecimiento de la marca fue de un 23%, gracias a la apertura de dos nuevas divisiones de producto así como el crecimiento de 12 departamentos ya existentes.
Los indicadores señalan que Hermès también se posicionó como una de las marcas de lujo más queridas entre el público asiático pues sus ventas crecieron en un 25% en toda la región asiática, sin incluir a Japón. Nuevas boutiques fueron abiertas en Taiwan y China mientras que seis más fueron renovadas. Por su parte, Japón, un mercado consolidado para la marca, creció al ritmo esperado para ese país, alrededor de un 7%, continuando con las cifras estables de 2011.
Lo que resulta aún más increíble es que el mercado europeo haya crecido un 15% con respecto a años anteriores, pues la presencia de Hermès ya tiene probado arraigo en el viejo continente. Casi las mismas cifras se lograron para América Latina con un 14% de crecimiento gracias a la ampliación de su línea de distribución.
En el sector de Alta Relojería Hermès mostró un gran comportamiento con un crecimiento de 17% respecto al año anterior, todo ello gracias a la nueva estrategia de presentar relojes totalmente diseñados y creados en la Manufactura. En total las ganancias netas de la marca de lujo fueron de 740 millones de euros, cifra que ayudará a seguir con los procesos de desarrollo e investigación de la Manufactura. Al mismo tiempo se crearon 800 nuevos empleos por lo que el compromiso de Hermès se amplía a un total de 10,118 trabajadores, de los cuales 6,110 se ubican en la matriz en Francia.
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